Como cualquier otro músculo del cuerpo, los músculos de los ojos comienzan a deteriorarse si no se ejercitan y cuidan. Nuestros ojos van perdiendo movilidad repercutiendo en la calidad y claridad de la visión física y mental. Nuestra visión física es un reflejo de nuestro estado mental. Si estamos confusos, dudosos, inseguros o estresados esto repercute empobreciendo la salud de los ojos.
Estos sencillos ejercicios se vuelven necesarios en dos dimensiones: para ver con claridad los acontecimientos de la vida -allá afuera- y los acontecimientos de nuestra mente -aquí dentro-.
El Estrés Visual
El Dr. William Bates (1860-1931) fue el primer oftalmólogo en comprobar científicamente cómo la configuración de los ojos se ve afectada por el estado de ánimo y las actividades de la vida cotidiana de las personas. Llegó a la conclusión que la visión está en permanente cambio, y que el estrés puede causar y agravar las alteraciones de la visión. El Dr. Bates dedicó toda su carrera a investigar y desarrollar un método que permitiera fortalecer los ojos y mejorar la visión de manera natural. Muchos de sus ejercicios fueron tomados y adaptados del Yoga.
Al igual que el resto del cuerpo, los ojos se mueven por medio de ciertos músculos que se contraen y se estiran. Y cuando no cambiamos de punto focal con cierta frecuencia, estos músculos se estresan y acumulan tensión; provocando la aparición de algunos síntomas: picazón, enrojecimiento, resecamiento o lagrimeo de los ojos, cansancio, disminución visual, dificultad para enfocar y dolor de cabeza.
Piensa, por ejemplo, cuando estás mucho tiempo con la vista fija en la pantalla del celular, la computadora o del televisor, leyendo o estudiando; el cuello y los hombros comienzan a ponerse tensos. Puedes notar el entumecimiento porque los músculos de esta zona son grandes y fuertes; y el dolor puede ser significativo. Los ojos también se resienten con el sobreesfuerzo, pero como sus músculos son pequeños no producen tanto dolor, y por lo tanto no llaman demasiado nuestra atención y cuidado.
¿Cómo puede ayudarnos el Yoga a mejorar la visión?
A través de la mirada interna que promueve el Yoga, se puede percibir más claramente la interacción existente entre los ojos, el cerebro y la mente.
"... Toda visión empieza con un pensamiento. Tus pensamientos son los que dictan cómo funcionan tus ojos, y este modo de funcionamiento de los ojos es lo que hace que cambie su estructura. Si aprendes a cambiar con la mente tu forma de funcionar, también podrás cambiar la estructura de tus ojos." Dr. Mier Schneider
Esta sesión de Yoga Ocular -trataka- ofrece la ayuda que nuestros ojos necesitan para mantenerse sanos con una visión clara. Con la práctica regular de estos simples ejercicios aumentará la flexibilidad y la fuerza de los músculos que rodean los ojos, a la vez que notarás los ojos más descansados y relajados.
Recomendaciones Generales:
- Mantén los ojos abiertos y relajados (excepto en el palmeo que se cierran).
- Focaliza tu atención en el movimiento de los ojos, evitando mover la cabeza y los músculos de la cara (en especial, los labios y el entrecejo que tienden a acompañar el movimiento de los ojos).
- Al igual que en otras posturas de Yoga, coordina la respiración con los movimientos.
- Respira de manera natural por la nariz.
- Realiza movimientos conscientes, lentos, continuos y sin forzar.
- Recuerda parpadear varias veces entre los ejercicios para humedecer los ojos.
- Puedes repetir cada ejercicio 10 veces (5 de cada lado), 3 veces al día.
- Realiza los ejercicios para los ojos preferentemente al final de la sesión de Hatha Yoga.
Los ejercicios de la sesión son:
#1.- Preparación: Si usas anteojos o lentes de contacto, recuerda quitártelos antes de comenzar tu práctica de Yoga ocular. Puedes hacer los ejercicios sentado en el piso, en tu silla habitual o acostado sobre tu espalda. Lo importante es que la posición te resulte cómoda y te permita mantener la columna vertebral alineada y la cabeza en su eje central.
Postura Sentada Fácil con las piernas cruzadas |
#2.- Adopta el Mudra Prana juntando las yemas de los dedos meñique y anular con el pulgar de cada mano. Los restantes dedos permanecen estirados y juntos. Apoya el dorso de la mano en la rodilla correspondiente. Relaja las manos... no realices ningún esfuerzo. Mantén el mudra prana durante toda la práctica, y deshaz cuando llegues al momento de realizar el ejercicio del palmeo.
Realizar el mudra prana ante estados de confusión, duda o 'caos mental', te ayudará a aclarar tus pensamientos, poner en orden tus ideas y de ser necesario tomar una decisión. En definitiva, ver más claro la vida.El Mudra Prana es conocido como el “Mudra de los ojos” porque mejora la capacidad de la visión y cura enfermedades oculares. Además, aumenta la vitalidad, armoniza la energía en todo el cuerpo y reduce el nerviosismo.
#3.- Relajación inicial: Cierra los ojos y empieza haciendo tres respiraciones profundas, inhalando y exhalando por la nariz. A continuación recorre todo tu cuerpo empezando por los dedos de los pies hasta llegar a la cabeza. Visualiza cada parte, y si notas alguna tensión, conscientemente afloja y relaja. Relaja la mandíbula, la lengua, los músculos faciales, el entrecejo, y observa qué tan relajados están tus ojos... cada vez relajalos más y más.
#4.- Toma de Conciencia: Mantén el enfoque en tus ojos... obsérvalos... siéntelos... sonríeles. Permanece en este estado meditativo unos 5 minutos. Al terminar, envíale amor y gratitud a tus ojos por el enorme trabajo que hacen. Lentamente abre los ojos. Parpadea suavemente.
#5.- Parpadear: Abre y cierra los ojos varias veces a gran velocidad. El parpadeo concede cierto descanso momentáneo a los ojos (al aislarlos de la luz), y al mismo tiempo los humedece. Parpadea varias veces entre un ejercicio y otro.
#6.- Ejercicios Básicos para los Músculos de los Ojos:
2. Mueve los ojos horizontalmente de derecha a izquierda: (↔) Inhala cuando vayas hacia la derecha y exhala cuando vayas a la izquierda. Repite 10 veces. Parpadea.
3. Mueve los ojos en diagonal derecha arriba, izquierda abajo: (⤢) Inhala mirando hacia el ángulo superior derecho, exhala mirando hacia el ángulo inferior izquierdo. Repite 10 veces. Parpadea.
4. Mueve los ojos en diagonal izquierda arriba, derecha abajo: (⤡) Inhala mirando hacia el ángulo superior izquierdo, exhala mirando hacia el ángulo inferior derecho. Repite 10 veces. Parpadea.
5. Mueve los ojos de manera circular: (↻ - ↺) Inhala mientras miras hacia arriba y bajas por el lado izquierdo. Exhala mientras miras hacia abajo y subes por el lado derecho. Repite 10 vueltas. Parpadea. Cambia de dirección por 10 vueltas más. Parpadea.